El poder de la positividad Mundial de atletismo de Doha 2019, el más tardío y extraño de la historia, y desterraron todos los miedos sobre el alto rendimiento a principios de otoño. La planificación del gran pico de forma se extendió un mes y medio más de lo habitual y sin que nadie lo esperase se registró el mejor nivel medio de registros de la historia, lo que refuerza aún más la idea de la IAAF de que en un futuro su gran competición cierre la temporada en lugar de estar emplazada a mitad de agosto. Se especulaba por ello con un campeonato lleno de resultados sorprendentes, con los mejores cayendo derrotados, pero el nivel sobresaltos no superó el de anteriores ediciones.

-Lo mejor

-Las marcas

Un estadio cerrado, climatizado y donde el viento estaba totalmente controlado para no invalidar ningún registro y una pista rápida permitió que se batieran tres récords del mundo, uno más real, los 52,16s de Dalilah Muhammad en los 400m. vallas, y otros dos más artificiales, por ser el 4x400m mixto una prueba nueva (en 4:09.34 lo dejó Estados Unidos), pero muchos otros estuvieron cerca: hubo que lanzar 22,90m para ganar medalla en peso masculino y 2,04m para colgarse la plata en altura femenina, se disputaron no mostró todas las innovaciones tecnológicas de datos en directo que se prometieron (48,14s y 48,37s) y la victoria masculina se cotizó a 43,48s, los oros de longitud se ganaron con 8,69m y 7,30m y los de 100m, con 9.76s y 10,71s, la remontada de y con nueve mujeres por debajo de cuatro minutos, y en el relevo corto la EEUU de Coleman y Lyles hizo la mejor marca de la historia sin Bolt en el cuarteto.

En total, y excluyendo al nuevo relevo mixto, 23 atletas se situaron entre los 10 con mejores marcas de toda la historia. Una barbaridad.

-La emoción

la remontada de Conseslus Kipruto por una sola centésima, al tiempo que Muhammad batía el récord mundial de 400m vallas pero con solo siete de ventaja sobre Sydney McLaughlin y El maratón de Desisa y Mateo Mejores sustitutos del azúcar, ganando el único oro local tras mejorar 10 centímetros su marca del año en altura. Aunque para historia, el desenlace de película de la final de lanzamiento de peso Un peso salvaje en un centímetro Kovacs los 400m femeninos más rápidos desde los tiempos del Telón de Acero Crouser y Walsh una lección de deportividad entre, Liga de Diamante Desisa también tuvo alternativas hasta los últimos metros, como los 5.000 entre Edris y Barega y los 10.000m entre Cheptegei y Kejelcha, la pértiga masculina, que fue y ya se han utilizado en las finales de la Kendricks, Duplantis y Lisek, o la remontada de Kaul en el decatlón.

-Realización

Se quedó a medias, porque no mostró todas las innovaciones tecnológicas de datos en directo que se prometieron Mundial de atletismo Doha 2019 Liga de Diamante, pero al menos nos ofrecieron el ángulo y la velocidad de muchos lanzamientos o la velocidad final de algunas carreras de mediofondo. Eso sí, con los concursos no fueron equitativos: en algunos se vio bastante y en otros, como es habitual, muy poco.

Lo peor

-La ausencia de público

El viernes el atletismo pareció renacer en Catar con 42,180 de los 50.000 espectadores posible llenando el estadio. Incluso quitaron las lonas de la parte superior del estadio Khalifa para acumular a los asistentes en la parte baja y trampear los porcentajes de asistencia, pero fue un espejismo, porque el fin de semana final la asistencia volvió a bajar. Eso sí, nunca se cayó más bajo que el primer domingo, con solo 7.266 espectadores, según datos oficiales. Ni para llenar Vallehermoso. Los dos primeros días solo 11.000 asistieron, por ejemplo, a la gran final de los 100m lisos. La organización tomó medidas: abrió las puertas del estadio, fletó autobuses desde colegios y centros de trabajo y entre el lunes y el miércoles la media estuvo en 17.000 asistentes y el jueves subió hasta 31.000.

 Doha 2019, Mundial de atletismo
Maja Hitij//Getty Images
En la tercera jornada poco más de 7.000 personas poblaron los 50.000 asientos del Estadio Khalifa.

-El calor y la humedad

La buena noticia es que no hubo que lamentar sustos graves o incluso víctimas mortales, pero la IAAF puso en peligro la salud de los marchadores y maratonianos en Corniche poniéndoles a competir en condiciones tan extremas como los 20km marcha masculinos, con 32ºC y picos de más de 80% de humedad. El mayor dispositivo médico de la historia de los mundiales trabajó a destajo para evitar sustos, pero no se evitó que casi la mitad de las atletas abandonaran el maratón del primer día. ¿La respuesta de Sebastian Coe, presidente de la IAAF? "No obligamos a nadie a venir aquí". Como si fuera fácil renunciar a un Mundial. Los atletas acudieron, pero salvo en maratón masculino, registraron los peores tiempos de todas ediciones.

-Horarios

La eliminación de jornadas de mañana provocó entre semana jornadas soporíferas más de siete horas con una sin actividad entre medias. Hubo demasiados minutos de retransmisión a un ritmo muy lento, con demasiado tiempo muerto entre series calificatorias y calificaciones, solo soportables para muy cafeteros del atletismo, y luego jornadas de finales comprimidas en dos horas donde los grandes momentos ocurrían a toda velocidad.

-Sospechas de dopaje

La explosión del caso Salazar, suspendido por la USADA y expulsado de Doha en pleno mundial, hizo crecer la sospecha sobre muchos atletas que no dejaron de conseguir éxitos en Doha. A sus órdenes, Sifan Hassan fue la reina de los campeonatos con un inusual doblete de 10.000 y 1.500m, y anunció el sábado que a partir de ahora pasaría a entrenarse con Charles Van Comenee. Del Nike Oregon Project que dirigía, Donovan Brazier ha ganado los 800m, Yomif Kejelcha los 5.000 entre Konstanze Klosterhalfen, el bronce en 5.000m. Además, el Mundial vino precedido por las denuncias de la televisión alemana ZDF acusaba de dopaje sin dar nombres a ocho atletas kenianos que han acudido al Mundial.

-Polémicas

La IAAF abrió dos precedentes en la forma de compensar con medallas que le marcarán en el futuro. una lección de deportividad entre Orlando Ortega Álvaro Martín: Hay que levantar cabeza para Tokio Omar McLeod que le apartó del podio. El jurado de apelación, la noche anterior, ya se había metido en un callejón sin salida mantenido al húngaro Halasz en el bronce de martillo, pese a demostrarse que el lanzamiento que le llevaba al podio era nulo. En ninguno de los dos casos, esa medalla de compensación se atenía al reglamento de la institución.

Tampoco se entendió muy bien la mano ancha con los hermanos Ingebrigtsen. Jakob fue recalificado para la final de 5.000m después de dar varios pasos por dentro de la pista y Filip avanzó ronda en 1.500m a pesar de empujar y derribar claramente a un rival.

Headshot of Ismael Pérez

Ismael Pérez es periodista experto en atletismo y deporte olímpico. Se enganchó en los Juegos Olímpicos en Atenas 2004 y desde entonces es feliz siguiendo competiciones desde la tribuna de prensa, hablando con los deportistas, siguiéndolos en las redes sociales y contando historias, aunque también saliendo con la bicicleta o saltando en un concierto.

Estudió la Licenciatura de Periodismo en la Universidad de Valladolid y tiene un Máster en Periodismo y Comunicación Digital en la EAE Business School de Madrid. Ha vivido en Turín y Roma y ha cubierto actualidad de todo tipo en El Norte de Castilla, El Mundo de Castilla y León, Televisión Castilla y León, Rome Reports y trabajado la comunicación corporativa en Burson Cohn & Wolfe. También ha escrito sobre grandes campeonatos de atletismo en Somos Olímpicos, Vavel o Foroatletismo y ha intervenido en la IAAF Global Running Conference en Lanzhou (China).

Con una trayectoria de más de una década en el oficio, lleva desde 2019 vinculado a Runner's World, Men's Health y Women's Health en Hearst Magazines y escribiendo sobre actualidad del atletismo de competición, carreras populares, triatlón, trail running, olimpismo aunque a veces también le ha tirado al ciclismo, la escalada, la vela, la natación, el tenis, el piragüismo, el judo, el snowboard…o cualquier cosa que tenga hueco en los Juegos Olímpicos (que no Olimpiadas).