Para empezar, la periostitis. ¿Qué es? Podría definirse como una inflamación grave del periostio, la membrana del tejido que cubre el hueso. Lo normal es que se dé en la tibia (de ahí que se la conozca también como periostitis tibial), entre el músculo tibial posterior y el sóleo. Eso es diferente de una periostitis infecciosa, causada por una infección por una bacteria que hay que combatir con antibióticos u otro tipo de fármacos.

Esta lesión suele manifestarse como dolor en las espinillas, molestias en la parte interna de la tibia o hinchazón en la parte inferior de la pierna, que puede darse con el ejercicio o ser continuo. Se sufre por el esfuerzo repetitivo de ese hueso y es bastante habitual entre los corredores principiantes.

Uno de nuestros lectores, Ignacio Barrera, sufre esta lesión, y por eso ha decidido preguntarle al director técnico de Runner's World Chema Martínez lo que debería hacer al sufrir periostitis con el hashtag #ChemaDigame en las redes sociales. La respuesta está en el vídeo, pero lo básico es bajar el ritmo de entrenamiento, acudir al fisioterapeuta para que dé unas pautas más concretas. Además, otros aspectos a tener en cuenta son usar zapatillas altas para lograr una gran amortiguación y evitar las superficies más duras como el asfalto. Y ojo, hay un aspecto curioso: a veces las caries de los dientes derivan en periostitis, así que si no se encuentra la causa clara conviene ir al dentista.

Si quieres que Chema Martínez despeje tus dudas de runner, no olvides el hashtag #ChemaDigame con tu pregunta en nuestras redes sociales.