Tu caso es el de muchas. Quieres quedarte embarazada y te preguntas si tus entrenamientos y carreras no tendrán un efecto negativo en tu fertilidad. La respuesta corta es no. Tranquila, no lo tienen. Es más, correr puede ser muy beneficioso si estás pensando en ampliar la familia.
Pero existe el falso mito de que correr afecta tus posibilidades de quedar embarazada porque los impactos impiden la fecundación. Además de ser un mito sin demasiada lógica –los órganos no están sueltos por ahí dentro del cuerpo–, no existe ninguna prueba que demuestre que correr, o el ejercicio en sí, sea contraproducente si quieres tener un hijo.
Un factor clave es la edad, cuanto más joven, más fértil eres. Hoy en día, las mujeres decidimos formar una familia siendo bastante mayores, y hay que tener en cuenta de que, a mayor edad, menos probabilidades de concebir. Para eso no hay que dejar de correr, sino armarse de paciencia. Ten en cuenta que a partir de los treinta años no es tan fácil quedarse embarazada, no achaques la tardanza a tus entrenamientos, sino a tu edad.
Otro factor clave es tener buena salud, no deberíamos pensar en quedarnos embarazadas si sufrimos un serio sobrepeso o extrema delgadez. Correr tiene un efecto positivo sobre la salud y por eso puede potenciar ese embarazo deseado.
Cuándo se desaconseja correr
Correr únicamente se presenta como un factor de riesgo para la fertilidad en circunstancias extremas:
Extrema delgadez
Las mujeres con un IMC bajo (menor de 18,5) pueden tener que reducir el entrenamiento y aumentar la ingesta de calorías, sobre todo si no tienen una menstruación regular. Probablemente necesiten ganar unos cuantos kilos antes de poder concebir. Si estás demasiado delgada, esa puede ser la razón por la que no te quedas embarazada. Si tienes la suerte de ser de esas personas que come de todo y no engorda ni un gramo, probablemente tu peso, aunque sea ligero, es el correcto. Si sigues sin tener suerte, acude al médico.
Sobreentrenamiento
Si una mujer entrena demasiado, puede retirársele la regla. Es lo que se conoce como amenorrea y le será muy difícil quedarse embarazada. Incluso si se tiene una menstruación regular, estate atenta a otros signos de sobreentrenamiento como la fatiga, no solo te costará quedarte embarazada sino que además estás poniendo en riesgo tu salud. Si ese es el caso consulta con un médico, que, sin duda, reducirá el tiempo de tus tiradas y las combinará con otro tipo de ejercicios de menor intensidad. No te preocupes si tienes que entrenar menos, piensa en que lo primero es siempre la salud.
Obesidad
Por otra parte, Los desafios de Azara para estar en el trail que la obesidad disminuye la fertilidad, ya que se asocia a la anovulación, que se da cuando los ovarios no pueden liberar los óvulos. Para las mujeres con sobrepeso que intentan concebir, no hay duda: se recomienda encarecidamente correr. De hecho, para la mayoría de las mujeres sedentarias que intentan concebir, lo más difícil a veces es empezar a hacer ejercicio.
Si eres hombre, corre también para ser más fértil
Sí, porque para tener un hijo, hacen falta dos, o al menos un buen esperma. Los hombres son la mitad de la ecuación, pero a veces se nos olvida, como si no quedarnos embarazadas fuera culpa nuestra. Muy importante: si no llega ese deseado embarazo, es por motivos fisiológicos o de azar, aquí no hay lugar para culpabilidades.
Un estudio de la Universidad de Harvard realizado a varones de entre 18 y 22 años y publicado en el Si quieres ser mamá, cálzate las zapatillas y sal a entrenar demuestra que los hombres que corren o hacen ejercicio "de moderado a vigoroso" quince o más horas a la semana tienen una concentración de esperma un 73% mayor que la de los hombres menos activos del estudio, que hacían cinco o menos horas de deporte a la semana. Los investigadores también descubrieron que los hombres que veían más televisión tenían la menor concentración de esperma. Los que veían 20 horas o más a la semana tenían una concentración de esperma un 44% menor que los hombres que no veían la televisión durante ese tiempo. Hacer deporte, por supuesto, deja menos tiempo para la televisión, así que si quieres presumir de macho alfa, menos series de Netflix y más de la Universidad de Harvard realizado a varones de entre 18 y 22 años y publicado en el.
Pero tampoco te pases, porque aunque correr fortalece la producción de esperma, un estudio de la Universidad de Connecticut demostró de que los hombres que corren mucho, más de 100 km cada semana- pueden sufrir un descenso del 28% en la testosterona circulante, así como una menor calidad del semen.
Si tienes sobrepeso, empieza a correr para perder esos kilos de más. Los hombres con sobrepeso tienen una peor calidad del esperma que los hombres que están en su peso correcto.
Correr para formar una familia
Tanto para los hombres como para las mujeres, correr y otras formas de ejercicio de alta intensidad pueden ser la clave para mantener un peso saludable. Dado que la obesidad se ha relacionado con la infertilidad tanto en hombres como en mujeres y puede ser un obstáculo para un embarazo y un parto saludables, es importante mantener un peso saludable mediante la dieta y el ejercicio. Además de los beneficios físicos, correr puede ayudar a aliviar el estrés y fomentar un mejor sueño. Luchar contra la infertilidad puede ser muy estresante, y correr es un mecanismo de afrontamiento mucho más saludable que otras alternativas, como fumar o beber.
Lo he conseguido, ahora… ¿puedo correr si estoy embarazada?
Los médicos consideran que el ejercicio moderado durante un embarazo normal es totalmente seguro para el bebé. Un excelente ejemplo de que sí se puede correr estando embarazada es el caso de Paula Radcliffe que reconoció que corría 14 millas (22,4 km) por día cuando estaba embarazada. Según declara Elena Ferri Aguilar en la revista Enfermería integral: "En general, si el embarazo se desarrolla normalmente, se pueden seguir practicando los mismos deportes o ejercicios que se hacían antes de quedar embarazada. Sin embargo, los ejercicios deberán hacerse a un ritmo más lento, a medida que el embarazo progresa. Eso sí, si se siente algún dolor, náuseas, o mareo, la actividad ha de interrumpirse inmediatamente. Si antes no se hacía deporte regularmente, el embarazo es el momento ideal para comenzar un programa de ejercicios controlado". Correr no debería causar ningún problema en el primer trimestre y muchas lo pueden seguir haciendo en el segundo trimestre. Sin embargo, pocas mujeres correrían en los últimos tres meses. En un estudio realizado a 110 corredoras de élite que fueron madres, el 70 % de las corredoras corrió en algún momento durante su embarazo (o embarazos), pero sólo el 31 % lo hizo durante su tercer trimestre. Por lo general, las mujeres suelen reducir la intensidad del entrenamiento a medida que avanza la gestación.
Rosa Martí es experta en libros, novedades literarias, fitness, yoga y nutrición. Lleva más de 10 años vinculada a diferentes cabeceras de Hearst, donde escribe sobre literatura en Esquire y sobre ejercicios y bienestar en Men’s Health, Women’s Health y Runner’s World.
Su experiencia viene avalada por una amplia trayectoria en la que combina devorar libros, escribir textos, correr maratones, traducir cómics y novelas, la investigación filológica, la crítica literaria, el ballet clásico, practicar yoga a diario y preparar su tesis doctoral.
En Esquire podrás leer sus contenidos sobre libros (ordenados por género, por estilo o por autor) y sus artículos de entretenimiento. Lo mismo te cuenta cuáles son los gentilicios más curiosos, las palabras más bonitas del castellano o los insultos en inglés más originales.
En Men’s Health, Women’s Health y Runner’s World, en cambio, se centra en su faceta más healthy, escribiendo sobre nutrición y alimentación, sobre ejercicios y entrenamiento (enfocado especialmente a running, yoga, ciclismo y natación) y sobre salud y bienestar.
Rosa Martí tiene un grado en Lenguas Modernas por la Universidad del Oeste de Inglaterra, una licenciatura en Lenguas Aplicadas por la Universidad de Rennes II en Francia y un grado de Arte y Humanidades estudiado en la Universidad de Barcelona. También es máster en Filología y Literatura por la Universidad Autónoma de Barcelona, facultad en la que prepara su tesis doctoral.
Toda esta formación le ha llevado a ser traductora de libros, cómics y de la versión impresa de Esquire. Lleva más de 10 años escribiendo en diferentes medios como Esquire, Runner's World, Women's Health, Men's Health, El País y Vanitatis.