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Cuando se trata de correr, algunos deportistas lo hacen mejor y más que otros. Después de todo, correr es una disciplina transversal, la base de todas las actividades deportivas. Pero nadie lo hará tanto como un corredor.
Fútbol
Los jugadores que juegan el Mundial de fútbol, por ejemplo, corren de media 11 kilómetros por partido. Y los árbitros aún más, hasta 13. Un campo grande de más de 100 metros de largo, una pelota en constante movimiento y pocas sustituciones hacen que los jugadores tengan un alto kilometraje en comparación con otros deportes menos concurridos o más estáticos. En concreto, son los centrocampistas los que más corren, llegando en ocasiones a los 15 kilómetros por partido.
Fútbol americano
Los jugadores de fútbol americano no tienen mucho tiempo para correr. El juego promedio real en la NFL es de solo 11 minutos. Los receptores y cornerbacks o esquineros corren casi 2 kilómetros por partido. Sin embargo, es una tarea nivelada considerando el tamaño y el peso de los jugadores, quienes ciertamente prefieren el gimnasio y la potencia a la carrera real. Eso sí, los que corren más pueden llegar a ser velocistas de élite, como en el caso de Devon Allen.
Baloncesto
La tecnología de seguimiento de última generación ha permitido a los técnicos de baloncesto y a los expertos realizar un seguimiento del rendimiento de los jugadores de la NBA en tiempo real, incluida la distancia recorrida por partido. A pesar del constante movimiento, el juego estático en las dos mitades y la corta distancia a recorrer del campo hacen que la distancia total apenas supere los 3 kilómetros por partido.
Béisbol
En béisbol, en promedio, se recorren 60 metros en cada entrada. La distancia entre cada base es de unos 30 metros. Alcanzando todas las bases (primera, segunda, tercera y carrera completa) más las bases robadas, la distancia total puede ser poco menos de 10 kilómetros. Por supuesto, los que fallan en la batida también corren mucho menos que los demás.
Tenis
La distancia recorrida por un tenista depende mucho del estilo de juego y de la duración de un partido, pero los más competitivos pueden llegar a casi 5 kilómetros persiguiendo pelotas de un lado a otro. Durante el partido de tenis más largo registrado en Wimbledon en 2010, se estimó que John Isner y Nicolas Mahut corrieron unos 10 kilómetros en 11 horas y 5 minutos de juego.
Hockey sobre hierba
Los jugadores de hockey sobre hierba también corren más tiempo que los deportistas de casi todas las demás disciplinas, persiguiendo y defendiendo la pelota durante casi 10 kilómetros durante los 70 minutos de juego.
